Concertista internacional de viola, con su ‘Ritual’ estreno en Aragón Isabel Villanueva fue la protagonista del pasado concierto en la noche del miércoles en Castiello de Jaca, un nuevo directo del XXXII Festival Internacional en el Camino de Santiago que organiza Diputación de Huesca. Apasionada en promover y dar a conocer su instrumento en todas sus posibilidades, la navarra ha actuado como solista con orquestas y en salas y festivales importantes en más de 25 países, colaborando con compositores actuales y ha estrenado más de 20 obras para viola, además de desarrollar su faceta como profesora en el Royal College of Music de Londres. Su cita con el festival ya era especial y más que esperada. “Este segundo álbum surgió precisamente en pandemia, y el poder volver al FICS con este proyecto tan personal me llena de emoción”, comparte.
El repertorio melódico que sonó en la iglesia parroquial fue una propuesta atemporal de más de mil años de música “en un contexto centrado en el ser humano y en la profundidad de la música, de la vida, un viaje de la mística y de la soledad de cada uno consigo mismo. Desearía que cada una de las personas que vinieron a compartir conmigo el concierto se hayan dejado llevar con los sentidos, y haber podido crear de forma pura un vínculo especial entre intérprete y público. Al final, las energías del directo son irrepetibles y cada ocasión es muy diferente”, destaca Isabel Villanueva.
Así, por Castiello de Jaca desfilaron las notas de Hildegard von Bingen, genia del medievo con un inicio de ritual basado en su canción titulada ‘Oda a la Sabiduría’, Bach como maestro indiscutible de la música de todos los tiempos con su gran Partita nº 2 que incluye la monumental Ciaccona —clímax de ‘Ritual’—, las miniaturas de Kurtág pensadas para ‘conectar’ y dar más profundidad y coherencia a las obras del programa, y Biber maestro del barroco con una de las piezas más bellas escritas para instrumento solo, su Passacaglia dedicada al Ángel de la Guarda.
La propuesta de ‘Ritual’ en su conjunto se enriqueció de este amplio espectro estilístico, buscando siempre la honestidad en el mensaje musical, la búsqueda de la belleza artística y la pasión de transmitir a través de la voz de la viola tal repertorio superior, motivos aplaudidos de forma emocionada por un respetable tan atento como respetuoso, fiel y muy muy cautivado por la materia regalada en cada nota.
“Hoy en día, me parece muy relevante el hecho de remarcar la importancia del directo y de ese momento único al que se llega en cada actuación”, apunta Villanueva. “El público es parte fundamental de ese acto”, una escucha que reconoció el maravilloso viaje realizado de manera intensa, honesta y sublime —más allá de los abismos— con la sola herramienta del instrumento a partir del corazón, temperamental y sereno, de esta gran e imprescindible artista en su género.
Desde marzo, la reconocida violista se encuentra en un agradable momento de ‘estreno y felicidad’ al compartir su nuevo álbum ‘Ritual’, “aunque es cierto que siempre estoy embarcada en diversos proyectos de índoles muy diferentes: esta temporada he estado de gira en Latinoamérica —continente al que cada año va—, y en donde he tenido ocasión de presentar conciertos como solista y recitales de otros formatos”, y también en numerosas ciudades europeas en proyectos de directos muy variados.
Para Villanueva, “la música antigua está en un constante crecimiento y difusión a gran escala, la verdad que yo como intérprete ‘clásico’ siento que la música barroca o antigua está muchas veces mucho más conectada con nuestros tiempos modernos que la música contemporánea. El hecho de presentarme yo en festivales de música barroca como lo estoy haciendo con mi nuevo álbum, también dice mucho de la apertura de este estilo y de no limitarnos o tener prejuicio de los géneros musicales”.