Susín (Biescas)
20 de Julio. 22. 30 horas
Teatro. Aforo: 250
En las faldas del monte Oturia, moldeadas por el antiguo glaciar que dio forma al valle de Oliván, se encuentra la solitaria aldea de Susín (Biescas), despoblada pero no abandonada, símbolo de soledad de las tierras de Sobrepuerto, igual que Ainielle.
Su patrimonio más emblemático es la iglesia de Santa Eulalia, mozárabe para unos y románica larredense para otros, pero edificada entre los siglos X y XI, con el ábside típico de la ruta de Serrablo, con baquetones y arquillos ciegos, y una preciosa ventana ajimezada, emblema del territorio. Sus pinturas murales se conservan hoy en el Museo Diocesano de Jaca.
Desde hace algún tiempo, a iniciativa de Angelines Villacampa, de casa Mallau y última vecina del pueblo, que contaba su historia a los visitantes, se impulsó la Asociación Mallau, para la rehabilitación de caminos, paredes, campos, huertos y de algunos edificios del pueblo, entre ellos la ermita de Nuestra Señora de las Eras.
De alguna manera, esta cita también va por ellos (y por ella).
Llegaremos a Oliván desde la N-260, tomando un desvío a la derecha, poco después de atravesar Senegüé. Pasado Oliván, tomaremos la pista general del valle en dirección a Susín, que encontraremos a unos 4 kilómetros.
Corral de García. La lluvia amarilla (Aragón)
El largo monólogo de Andrés de casa Sosas, el último de Ainielle, en su última noche, en ese momento donde la vida y la muerte pasan por delante de sus ojos, han convertido a La lluvia amarilla en uno de los hitos de la literatura española de los últimos treinta años. La novela mítica de Julio Llamazares fue uno de los primeros textos que miraron a los ojos de la España vaciada, ahora tan manoseada.
El espectáculo es una producción audiovisual de Corral de García, adaptado y dirigido por Jesús Arbués e interpretado por Ricardo Joven y Alicia Montesquiu. En él, la música en directo y la delicada poesía de la imagen en video mapping crean un montaje estremecedor y respetuoso con la novela de Llamazares, pero también un potente espectáculo puramente teatral en el que los recursos escénicos se usan al servicio de la palabra.
La idea de representar en Ainielle la adaptación teatral de La Lluvia amarilla fue la primera que barajó la organización, ya en 2022. Pero la realidad es tozuda y hoy en día sería excesivamente complejo el acceso a Ainielle para el público en general. En su lugar, el escenario elegido es el pueblo de Susín (Biescas) en la entrada a Sobrepuerto y a escasas dos horas andando de Ainielle.
