La explosiva actuación de Nathy Peluso puso el punto final a Pirineos Sur 2022, una edición que ha batido récords de asistencia en Lanuza: casi 45.000 espectadores y cuatro sold outs. El número de espectadores se ha duplicado respecto al año 2019, la última vez que se celebró dado que la crisis sanitaria del Covid-19 ha provocado sus suspensión en los últimos dos años. El público que ha acudido al anfiteatro durante las 13 jornadas ha provenido de 26 países diferentes y de todas las provincias españolas. Se estima que esta XXIX edición de esta cita cultural, que impulsa la Diputación Provincial de Huesca con la gestión del escenario flotante por parte de Sonde 3 Producciones, ha supuesto un impacto económico superior a los siete millones de euros en el valle de Tena. 

“Esta 29 edición de Pirineos Sur, y primera para nosotros como dirección del festival, no podía haber sido mejor. Nos marcamos dos objetivos claros: rejuvenecer la audiencia y aumentar el número de asistentes de años anteriores; y una vez acabado el festival podemos decir que los objetivos se han cumplido. Así lo explica Germán Quimasó, director artístico de Pirineos Sur y gerente de Sonde 3, la nueva promotora gestora. “Además, estamos muy contentos con cómo se han desarrollado las jornadas de conciertos, tanto público como artistas han disfrutado del festival consiguiendo una comunión como en pocos festivales se puede vivir”.

Y es que, recién cerrada esta edición, ya están pensando en la próxima: la celebración de las tres décadas de uno de los festivales más longevos del país y un referente en diversidad musical. Y el reto es complejo, ya que este año el evento ha superado todas las expectativas en todos los sentidos: cuatro sold outs (Estopa, Rozalén, Residente y Crystal Fighters), público e impacto económico en este valle del pirineo aragonés.

La diputada de Cultura de la DPH, Maribel de Pablo, ha afirmado la satisfacción de los resultados porque, tras el paréntesis de la pandemia, el público había "echado en falta un festival tan relevante como Pirineos Sur y el regreso ha sido inolvidable, con un cartel lleno de grandes artistas y una amplia variedad musical y cultural que ha sido posible gracias al modelo de gestión público-privado que caracteriza en las últimas ediciones al Festival Internacional de las Culturas".

En total, según datos estimados, cada visitante de Pirineos Sur ha gastado de media por día 160 euros, sumando un total de 7,2 millones de euros de impacto en la zona, concentrándose especialmente en alojamiento, restauración y actividades deportivas. Y es que más del 80% del público ha venido de fuera de Huesca, más del 50% fuera de Aragón, concretamente desde 26 países distintos y de todas las provincias españolas. Todos estos datos confirman la proyección nacional e internacional del festival oscense.

“Creo que Pirineo Sur ha vuelto con mucha fuerza y con gran acogida por parte del público debido a los dos años de ausencia. El cartel ha sido muy potente y la ocupación ha rozado el 100 por 100, exactamente un 98%”, indica Jesús Pellejero de la asociación turística Valle de Tena. 

Un cierre explosivo con Nathy Peluso

La última jornada de Pirineos Sur contó con la actuación de Nathy Peluso, a la que acudieron 2.800 espectadores, muchos ya esperándola a la entrada del escenario flotante con una entrega total y mucha emoción. La argentina derrochó talento, carisma y magnetismo a raudales; es un animal escénico. Con “Celebré” y “Sana sana” ya tenía el anfiteatro a sus pies, casi hipnotizado con sus bailes, su poderío vocal y su magnífica banda de acompañamiento. 

Ese arranque, con algunos de sus temas de sonido más moderno, cercano a las músicas urbanas y al hip hop, dio pasó a una cadena de brillantes canciones que alternaban la salsa y el rythm and blues de regusto ochentero (“Buenos Aires”, “Puro veneno”, Sugga”). “Ateo” se coronó como una de las canciones más coreadas de todo el festival y la entrega total con sus fans continuó con otra espectacular “Mafiosa”. 

“Nasty girl” significó el regreso al hip hop, a ese que sabe darle un barniz moderno pero sin perder su esencia clásica. Continuó por esa senda, pero otorgando al show un empaque más electrónico en el final, con “Corashe”, con la que ella sola delante de unas pantallas demostró sus espectaculares dotes para el baile. Después de recorrer géneros, transformarlos a su antojo y otorgándoles toda su personalidad, cerró el concierto con su versión de “Vivir así es morir de amor” de Camilo Sesto. Final apoteósico para el que es, sin duda, uno de los mejores conciertos de Pirineos Sur 2022. 

Con este cierre acaba una edición de récords. Y lo que queda, porque según Quimasó “ya estamos trabajando para que la próxima edición sea memorable. De hecho, ya tenemos cerrados artistas internacionales que nunca han pisado este escenario único y harán que el treinta aniversario de Pirineos Sur sea inolvidable y esté a la altura de su leyenda. Larga vida a Pirineos Sur y nos vemos el año que viene”.