Durante los primeros años que sus vidas, niños y jóvenes pasan muchas horas en sus centros escolares, instalaciones que se degradan con el paso del tiempo y a cuyo mantenimiento colaboramos anualmente en la medida que nuestro presupuesto nos lo permite. Pese a no formar parte de las competencias que esta institución tiene transferidas, con esta acción ayudamos a los ayuntamientos que lo solicitan, en su mayoría pequeños consistorios, a afrontar el coste de unos trabajos que, de otra manera, no podrían asumir, redundando tanto en beneficio de la administración local como de los más pequeños.