27-06-2009 Músicas inclasificables y embaucadoras. Diversidad y talento. Contundencia y sencillez. Todo ello características de un festival con señas de identidad ajustadas a los tiempos que corren, donde la pluralidad es la realidad de la vida y de la música.
A las veinte horas está prevista la actuación de Bigott en el Jardín de Espacio Pirineos. Los comentarios sobre el fallecimiento de Michael Jackson son habituales entre los primeros asistentes. El artista de Zaragoza aparece con apenas tres minutos de tardanza. Sus primeros acordes intuyen la peculiaridad de un músico-personaje inclasificable desde la mirada habitual con la que se encasilla a música y músicos. Recuerda a Boris Vian, Tom Waits, Johnny Cash o Leonard Cohen, sin parecerse a ninguno de ellos. Más de una docena de canciones se encadenan tras el inicial "The new pornogarphers". Una propuesta neo-folk sugerente, surrealista y efectista que atrapa a un público que comienza a llenar el lugar. Se acompaña de una excelente formación cuyo talento está a su servicio y complicidad. Una hora de actuación que se hace corta y vuelta al escenario para despedirse con "Afrodita carambolo". Un magnífico inicio de jornada; la noche promete.
La siguiente cita es en el Centro Recreativo Gradense. A las 23 horas está anunciada la actuación de El Niño de la Hipoteca, que se presenta con la aureola de ser uno de los grandes protagonistas de la última edición del "Barnasants", certamen que se celebra anualmente en Barcelona especializado en la música de autor, poniendo de manifiesto desde el primer tema "Que te vaya bien", que es una realidad con mucha intención, un aire fresco para un estilo musical en muchas ocasiones encorsetado. El público va llenando el espacio cubierto del CRG cuando Guiu Cortés, nombre real de El Niño, vuelve a interpretar, como despedida, el tema que abrió su concierto en "atención a aquellos que se lo perdieron por llegar tarde".
La noche prosigue con una puntualidad inhabitual en este tipo festivales. Es medianoche cuando Raimundo Amador sube a escena. Hablar del artista andaluz es mencionar a uno de los grandes músicos a nivel internacional. Participante y autor de algunos de los proyectos más trascendentes de nuestra música popular en los treinta últimos años. Su concierto "Blueslerias" fue un lujo musical de un virtuoso inigualable arropado por una banda excelente. La música más de raíz dio paso a la urbana de KraKovia, una de las bandas más simbólicas del afterpunk patrio de los últimos tiempos. Un espectáculo músico-cabaretero que atrapa visual y musicalmente desde "From the darkness". Contundencia artística donde la cantante Vinila Von Bismark juega un papel determinante conocedora de la importancia de la seducción en la música. Atracción que explota magistralmente con la complicidad de sus compañeros que nos transportan al lado oscuro, musicalmente, de las noches de Berlín, Madrid o Graus. "Bienvenidos a la Época Iconoclasta" es el álbum que presentó en directo la banda Los Delinqüentes. Un paso más en la evolución del grupo de Jerez de la Frontera. Una mezcla de flamenquito y diferentes percepciones roqueras que ellos califican como garrapatero que encandiló al numerosísimo público que casi llenaba el recinto.
Se llevan cinco horas de música continua y con sólo diez minutos de retraso toma el relevo el grupo de Pamplona, El Columpio Asesino. No es casualidad que tras diez años de existencia se hayan convertido en una de las bandas más solidas y coherentes de nuestra música. Un recorrido por múltiples facetas musicales que atrapan sin consideración, que les ha llevado a presentarse, recientemente, en el Museo de Arte Contemporáneo de Shanghai. En directo combinan temas de su último trabajo "La gallina" con otros de su repertorio clásico. Himnos como "México" o "No tienes que decirme nada" una canción que debe pasar a formar parte de los temas imprescindibles de nuestra música popular. Un directo excelente, repleto de atmósferas cambiantes donde guitarras, teclados, duetos, batería... se ensamblan haciéndonos participes de algunos de los momentos estilística y musicalmente más apasionantes de los cuatro años de festival. La noche finalizó como se inició. Músicas inclasificables y embaucadoras. Diversidad y talento. Contundencia y sencillez. Todo ello características de un festival con señas de identidad ajustadas a los tiempos que corren, donde la pluralidad es la realidad de la vida y de la música .