Casi cien nuevas hectáreas impulsarán la producción trufera de la provincia de Huesca. Los miembros de la Comisión de Iniciativas Locales de la Diputación de Huesca han dado hoy el visto bueno a la convocatoria anual de ayudas a este sector que en 2006 contará con una partida económica de 339.086 euros. Huesca ha logrado situarse entre las provincias españolas con mayor número de cultivos de nueva plantación.

Este plan, emprendido por la Diputación de Huesca en 2002, pretende hacer de la trufa un cultivo alternativo en zonas de media montaña, sobre todo en aquellas que están sujetas a figuras de protección medioambiental y donde la producción agrícola es escasa. La Comisión de Iniciativas Locales ha aprobado ayudas a 41 productores, la mayor parte dedicadas a la creación de nuevas plantaciones. Las zonas que presentan una mayor demanda de este cultivo son la Comarca de la Ribagorza y Jacetania, aunque también se han aprobado cinco proyectos en la Hoya de Huesca, dos en la Comarca del Somontano-Barbastro y uno en el Cinca Medio.

El diputado de Iniciativas Locales, Javier Mur, recuerda que desde que se inició este programa, con poco más de 17 de hectáreas, "a finales de este año se superarán las 350 hectáreas de cultivo en la provincia". Esta convocatoria anual se dirige a la instalación de vallado o riego para "servir de complemento a las ayudas que promueve el Gobierno de Aragón", precisa Mur. En el Alto Aragón se produce la especie denominada Tuber Melanosporum (trufa negra), variedad que se cultiva en zonas de encinas y carrascas.

Las subvenciones llegan a superar este año los 36.000 euros y las hectáreas de cultivo oscilan entre las 0,37 y 10,33. A estas ayudas económicas se suma la labor de asesoría técnica que presta el área de Iniciativas Locales a los truficultores de la provincia.