Juanjo Javierre presentó en público su álbum recopilatorio y demostró que las canciones que le popularizaron con Los Mestizos siguen contando con un público entusiasta. Del flamenco de Tomás de Perrate a la música "electro-bereber" de Naab, el Festival continuó mostrando la diversidad de propuestas que lo caracteriza.

El Festival EN LA LínEA concluyó su segundo día de actuaciones con la música electrónica más actual con la actuación de Naab; pero los sonidos del pop fueron los que dominaron en una noche en la que el certamen tuvo otro de sus platos fuertes con la presentación en concierto de "Primera vuelta completa", el nuevo disco del oscense Juanjo Javierre.

Comenzó la noche con el grupo catalán Whiskin's, con un repertorio de pop actual con melodías pegadizas y canciones bien trabajadas, con cuidadas bases rítmicas y armonías vocales. Muy distinta, pero de probada eficacia es la propuesta de Starkytch, dos DJ de Zaragoza que lo que ofrecen es simplemente una fiesta pinchando algunas de las canciones bailables más conocidas de los años 60, 70 y 80.

Starkytch hizo moverse al público con una mezcla en la que conviven Eurovisión, los Bee Gees, Alaska, La Bola de Cristal... y toda una serie de referencias sentimentales. Una reivindicación de lo retro apoyada en una presentación colorista y desenfadada, a base de proyecciones, la actuación de dos bailarinas y una drag-queen, las incansables intervenciones con el público de Carlos e incluso el sorteo de regalos.
La noche continuó con Juanjo Javierre, que inició su actuación declarándose nervioso por volver a tocar en público alguno de sus temas más antiguos, parte del recién editado álbum "Primera vuelta completa", en el que repasa una carrera de veinte años.

Sin embargo, las nuevas versiones de clásicos de su etapa en Los Mestizos como "Sentirse bien" o "La pócima del amor" demostraron seguir contando con un público entusiasta; como se demostró en las peticiones de bises.

Y concluyó el programa del jueves con Naab, un francés hijo de emigrantes argelinos que demostró el derroche de libertad que le ha dado fama, con una mezcla sonora en la que los ritmos norteafricanos se mezclan con los acordes más cosmopolitas. Su música se reforzó además con las proyecciones del videojockey Kinox.

La programación de la tarde también incluyó otra muestra de la música de discoteca, con el zaragozano Sergiopedro Herrero, que con el nombre de El Gran Puzzle Cózmico, destaca por su estilo desenfadado, en el que completa las programaciones y los sampler con unas letras humorísticas y ácidas y distintos efectos sonoros.

Antes, fue el turno de dos cantantes enraizados en la música tradicional, pero a la que aportan su visión personal: Antón Abad y Tomás de Perrate; el primero un heredero de la canción de autor más prestigiosa, y el segundo, el último representante de una de las dinastías más afamadas del flamenco.