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La DPH refuerza su programa cultural con actividades didácticas para escolares
Imagen: La DPH refuerza su programa cultural con actividades didácticas para... 29-05-2010
Más de treinta escolares del Colegio Alcoraz de Huesca realizan una visita didáctica el próximo lunes 31 de mayo, que estará centrada en el mural 'Elegía' de la Sala Saura de la Diputación de Huesca para conocer la historia de la emblemática pintura de Antonio Saura que representa a la Institución provincial.

La Diputación de Huesca refuerza su programa de actividades culturales con la programación de una serie de talleres didácticos destinados a escolares de los colegios de la provincia de Huesca. El objetivo es adentrar a los más pequeños en el mundo de la cultura mediante propuestas que les permitirán conocer distintas disciplinas artísticas mientras se divierten.

El próximo lunes 31 de mayo tendrá lugar la primera actividad con la visita de una treintena de niños de Infantil procedentes del Colegio Alcoraz de Huesca, que junto a dos monitoras de artes plásticas de la Diputación, descubrirán la historia que esconde la obra 'Elegía' de Antonio Saura, que cubre el techo del espacio que lleva el nombre del artista altoaragonés en la Institución provincial.

La actividad comenzará observando de forma detallada la pintura, para ello los niños se tumbarán en el suelo de la sala para contemplar los colores y las originales formas que dan vida al mural. Tras este ejercicio las monitoras explicarán la vida y la obra del artista, así como la historia y las peculiaridades de esta pintura. Por último, divididos en grupos, los alumnos recrearán la obra de Saura en un puzzle.

A lo largo de los próximos meses y coincidiendo con la muestra de Benjamín Fernández que organiza la Diputación con motivo de la celebración del Festival de Cine de Huesca, se llevarán a cabo otros talleres didácticos destinados a escolares y miembros de asociaciones de la provincia.

La obra 'Elegía' de Antonio Saura es una de las pinturas más especiales en el contexto de la obra del artista nacido en Atarés, no sólo por sus dimensiones sino también por su destino y por el hecho inhabitual en su trabajo del empleo del color. La pintura, que mide 20 metros de largo y cuenta con una anchura de otros 10 metros, fue realizada en 1987 con el fin de cubrir el techo de un salón del edificio de la Diputación de Huesca y fue creada por partes hasta constituir lo que hoy representa un símbolo de la modernidad en la provincia.