Ojos de Brujo se despide de su público en Pirineos Sur en una jornada en la que a media tarde las entradas estaban ya agotadas, convirtiéndose en el concierto con más asistencia de espectadores en los veinte años de la historia del Festival. Arrancaron la actuación con "Corriente vital" título de su último disco donde han participado entre otros Amaral, Bebe, Jorge Drexler o Manolo García.
Poco a poco van desgranando algunos de sus éxitos con la presencia de los cubanos Roldán de Orishas que interpreta "Todos mortales" y Kumar con el que hacen "La machine". Minutos después se produce una oscuridad total en el escenario apareciendo solo acompañándose de la guitarra Peret. La ovación es histórica. El rey de la rumba interpreta "Canta y sé feliz", la canción con la que nos representó hace años en el festival de Eurovisión. Interpreta a continuación, acompañado de Marina, "El muerto vivo". "Sultanas de merkadillo", "Tantas flores" y "Ventilador R-80" son las canciones que cierran el concierto del grupo ya sin invitados.
El público obligó al grupo a volver a escena para interpretar "Tahitá" y "Ná en la nevera", para concluir Marina cantando a capella un tema en solitario. Esa misma noche también actuó D' Callaos, una banda también catalana que desde el primer tema "El viajero" hasta el último "Yayo tumna" mostraron su capacidad para atraer, buscar y encontrar la complicidad de las varias miles de personas que por primera vez los escuchaban en directo.
La banda de Marina y Maxwel Wright, que actuó por primera vez fuera de Cataluña en Pirineos Sur en 2001, se ha mostrado orgullosa de actuar nuevamente en un escenario que consideran "mágico". Marina Abad, cantante y principal referente de la banda, ha asegurado que después de una larga trayectoria desarrollada por toda Europa "puedo decir que Pirineos Sur es uno de los festivales de mayor nivel tanto en programación como en organización. Además tiene algo que no tiene ningún otro, que es este escenario tan maravilloso". Marina, que tiene vínculos familiares con Aragón, ha reconocido que cada vez que actúa en Pirineos Sur "siento algo especial, como una responsabilidad porque vuelvo a encontrarme con unos paisajes que forman parte de mi infancia".
Aunque ha señalado que no descarta en el futuro un regreso, tanto Marina como Maxwel han apuntado que ya trabajan en nuevos proyectos musicales y artísticos. La cantante de Ojos está inmersa en la recuperación de un texto que escribió el poeta García Lorca para ser musicalizado por Manuel de Falla. De momento, el grupo sigue inmerso en su gira de despedida que le llevará hasta noviembre por varios escenarios de Europa y Sudamérica.
Más de 60.000 espectadores
La última rueda de prensa ha servido para hacer el balance de la XX edición de Pirineos Sur. Lourdes Arruebo, diputada de la Diputación Provincial de Huesca, ha señalado que este año se ha registrado un incremento de un 25% en el número de espectadores en los espectáculos de pago, "una cifra que nos hace sentirnos muy satisfechos". En términos absolutos, por los conciertos de Lanuza han pasado más de 20.000 espectadores; que sumados a los 40.000 que han acudido a las actividades paralelas organizadas en Sallent de Gállego elevan la cifra total a 60.000 espectadores. Arruebo ha recordado que buena parte del impacto económico que genera este turismo "revierte en el valle y ayuda a dinamizar el territorio". Luis Calvo, Director de Pirineos Sur, se ha mostrado satisfecho "por recuperar el público perdido el pasado año e incluso incrementarlo con respecto a la edición de 2009".
"Bienvenidos al Gran Circo Internacional de la Vida"
"Vida", el proyecto de cooperación dirigido por Paco Paricio con Los Titiriteros de Binéfar y la École Nationale de Cirque Shems'y de Rabat puso un brillante y festivo colofón a la XX edición de Pirineos Sur. Cerca de 1.500 personas, buena parte padres y niños, disfrutaron en una tarde de postal del proyecto en el que han trabajado en los últimos meses las dos compañías artísticas. El resultado estuvo a la altura de lo esperado tratándose de Paco Paricio y Pilar Amorós, esos magos de la creación que en cada nueva producción crecen profesional e intelectualmente.