La vigésima edición del Festival Internacional en el Camino de Santiago que organiza la Diputación Provincial de Huesca llegaba ayer a su fin con el concierto de clausura del maestro aragonés José Luis González Uriol y puso el mejor broche posible a un certamen muy consolidado entre las citas más importantes de música antigua en España. El director del festival, Luis Calvo, destaca que pese al recorte de presupuesto provocado por la supresión de la subvención del Gobierno de Aragón, "el festival no ha perdido un ápice de calidad y de personalidad. Apostamos por reducir el número de conciertos, que solía ser de diez/once conciertos a tan solo ocho y la decisión fue acertada".
El festival ha vuelto a contar con artistas de talla mundial como ha sido el caso de Dominique Vellard, director del Ensemble Gilles Binchois; con algunos de los mejores intérpretes de España y Europa como son Fahmi Alquai (Accademia del Piacere), José Hernández Pastor (Cantoría Hispánica), Josep Cabré (Nova Lux), José Luis González Uriol o Luis Delgado (Al Buruz); y también con lo mejor de la música y la escena aragonesa: Javier Ares (Antigua Capilla Hispana), María José Hernández y Joaquín Pardinilla ( Al Buruz) o Silvia Márquez (La Tempestad).
El sistema de acceso a los conciertos, que eran gratuitos, pero con invitación ha vuelto a mostrarse como un acierto pues evita las colas y largas esperas a las puertas de las iglesias. Por segundo año consecutivo los espectadores podían descargarse las entradas de la página web o bien adquirirlas en el Palacio de Congresos de Jaca y de hecho, al poco de comenzar el festival ya no quedaban invitaciones para ninguno de los conciertos, aunque después en la mayoría de los recitales quedaron sillas vacías. "Hay quien adquiere las invitaciones sin saber a ciencia cierta si va a acudir finalmente o no. Eso nos obliga a tratar de readjudicar esas invitaciones para que no queden asientos vacíos, pero no siempre hay público suficiente esperando para esa redistribución. Es un pequeño problema que intentaremos aminorar, pero que no empaña en absoluto el sistema de acceso con invitación, que es, seguro, el camino a seguir", explicó Calvo.
Una vez más han sido las iglesias del Carmen y Catedral en Jaca; y las iglesias de Santa María en Santa Cruz y de Santa Eulalia en Berdún -con la salvedad del Palacio de Congresos en el caso de Al Buruz- las elegidas para servir de marco al Festival Internacional en el Camino de Santiago. Cada uno de esos "escenarios" imprime carácter al concierto. En la iglesia del Carmen suele haber más cercanía y más entrega por parte del público; la Catedral pierde cercanía, pero gana en majestuosidad, y la iglesia de Santa María tiene un carácter íntimo que la hace especial.
Una vez cerrado el capítulo de la música antigua, el festival tiene todavía dos citas pendientes, el Mercado Medieval de las Tres Culturas, que del 23 al 25 de agosto ocupará las calles del Casco Antiguo de Jaca, y el Festival de Teatro de Calle, que tendrá lugar en Berdún el último fin de semana de agosto. El Mercado Medieval está organizado por el Ayuntamiento de Jaca y se articula en tres zonas distintas en torno a las plazas de la Catedral, Biscós y del Marqués de La Cadena, y en sus calles adyacentes para recordar la actividad comerciante y artesana que florecía en la ruta jacobea. Alrededor de un centenar de paradas con venta de productos y degustaciones que se complementan con las demostraciones de antiguos oficios divididos en tres zonas que tratan de reflejar las culturas judía, musulmana y cristiana.
Por su parte, el Festival de Teatro de Calle que organiza la Comarca de La Jacetania visitará en esta ocasión Berdún -Santa Cilia, Santa Cruz de la Serós y Bailo son las otras sedes alternas- los días 27 y 28 de agosto. Un total de siete actuaciones en horario de tarde y noche reunirán en Berdún a compañías como Teatro Móvil, Absurdia Teatro o Trapu Zaharra.