Antonio Serrano, Daniel Oyarzabal y Pablo Martín Caminero actuaron en Canfranc Estación dentro del XXXIII Festival Internacional en el Camino de Santiago
Obra del gran arquitecto ciudadrealeño Miguel Fisac, la iglesia parroquial de Nuestra Señora del Pilar en Canfranc Estación acogió la tarde del pasado martes un nuevo concierto del XXXIII Festival Internacional en el Camino de Santiago. El directo contó con dos grandes bazas, por un lado poder escuchar un instrumento como la armónica, tocando música de Bach como si fuera un violín barroco, “y descubrir que abruma la capacidad que tiene para transmitir emociones y virtuosismo, en las manos del gran Antonio Serrano”, Grammy Latino 2015, destaca su compañero Daniel Oyarzabal; y por otro lado, el disfrute en un mismo directo de lo que en realidad son dos conciertos, ya que en la primera parte se pudo observar la sonoridad y la música de Bach tal y como estaba escrita, “respetando cada una de las notas del Maestro”, y en la segunda, asistir a un concierto de jazz, con composiciones inspiradas en numerosas obras de Johann Sebastian Bach.
Antonio Serrano (armónica), Daniel Oyarzabal (clave, fender rhodes, Behringer Poly D) y Pablo Martín Caminero (contrabajo y violone) son un trío de músicos que llevan en un escenario casi 40 años, y son amigos y tocan juntos desde hace 30. Esa complicidad se respira en todos sus conciertos y es una de las grandes claves en su conexión con el respetable. El proyecto Bach & ‘Bach’ se estrenó en la Sala de Cámara del Auditorio Nacional de Madrid en febrero de 2021 y, desde entonces, todo son éxitos.
Los tres invitaban llegar al recital sin prejuicios ante la idea de escuchar Bach en la armónica, porque, como bien dice Oyarzabal, “con toda seguridad, si Bach hubiera conocido la armónica, hubiera compuesto música para ella”. Daniel Oyarzabal es organista, clavecinista, pianista y arreglista. El centro de su actividad musical se focaliza en la música clásica, con especial interés en la música antigua, pero también ha cultivado siempre el jazz, toda una arquitectura paralela que se desarrolló con maestría, detalle y pasión, para el deleite de los asistentes a la iglesia de Nuestra Señora del Pilar.
Bach & ‘Bach’ encajó a la perfección con la ‘Encrucijada', epígrafe común en esta edición del festival a las distintas propuestas y variantes sonoras. Desde el primer minuto, la velada hizo las delicias del curioso, atento y entregado público que abarrotó la iglesia, y que se hubiera quedado horas y horas disfrutando de la escucha. Armonías, melodías y atmósferas conjugaron la belleza máxima y un sinfín de piruetas barrocas a la par que jazzísticas, donde lo dispar se transformó en rítmico y sencillo. Más allá de cualquier laboratorio sonoro que se dijera, en Canfranc Estación resultó ser la espontaneidad de la vida, la fluidez de la creación y su arte, y una celebración comunitaria de la Música con mayúsculas.
Serrano, Oyarzabal y Martín Caminero. En lo que respecta a la música antigua o barroca, para estos tres artistas no ha habido un momento en España con más cantidad de grupos e intérpretes extraordinarios. “Sólo queda que todos programadores tengan constancia de ello”, recuerdan y solicitan. “Somos músicos muy activos y nos sentimos muy afortunados por ello”, comparten, y nosotros, dichosos de haber podido experimentar sus fabulosas miradas a la música de Johan Sebastian Bach, para muchos, el compositor más importante de la Historia de la Música.