Capella de Ministrers actuó en Santa Cruz de la Serós dentro del XXXIII Festival Internacional en el Camino de Santiago
La noche del pasado martes, la iglesia de Santa María de Santa Cruz de la Serós acogió un nuevo concierto del XXXIII Festival Internacional en el Camino de Santiago que organiza la Diputación de Huesca. ‘El Grial, lamento de Perceval’ fue el segundo gran recital en territorio oscense realizado por esta edición a cargo de la Capella de Ministrers que dirige Carles Magraner. En el precioso, sobrio y auténtico directo, el Grial fundió la música con la literatura medieval. Su propuesta sonora escapó de la leyenda y de sus letras para conectar directamente al curioso y atento público con el verdadero sentido y significado cultural del Grial.
Fue un muy valioso recorrido por las músicas que conforman el camino que atravesó a través de los siglos, “desde las canciones de Cruzadas, los cantos de centros de peregrinación o el reflejo de la literatura medieval en la música, hasta el simbolismo emblemático que adquirió con Alfonso el Magnánimo”, destaca Carlos Magraner. Para ello, Capella de Ministrers ofreció con detalle y rigor en Santa Cruz de la Serós música y poesía de la Edad Media en torno a Chrétien de Troyes, Robert de Boron, Wolfram von Eschenbach y Hélinand de Froidmont, sonidos y versos de toda una vasta temática vinculada al cosmos e imaginario del reconocido Grial, “que nos invita a encontrar su significado como búsqueda personal desde el conocimiento de nuestro pasado mediante la recreación musical”.
Cuando alguien se detiene, para y escucha la música de Carles Magraner, lo que percibe no es sencillamente una sucesión de notas producidas por los golpes de su arco sobre las cuerdas de la viola da gamba, sino que descubre sonidos transformando lo que resulta ser toda una cadena consecutiva de sentimientos y emociones, sensaciones e inmersiones a otro tiempo y lugar. De la misma manera, su extensa carrera profesional no puede ser entendida como un gran número de conciertos y grabaciones, es más bien la historia de un enorme esfuerzo y tesón, así como el resultado de su pasión y compromiso con la cultura, la investigación y la creación.
Mari?a Jonas estuvo sublime con su voz como trovadora contemporánea, trobairitz, canto y symphonya, que junto a la viella, viola y rabel del gran Magraner se fundió el poderoso buen hacer de Robert Cases al lau?d, arpa, ci?tola y viola de pe?n?ola y el de Eduard Navarro con sus oud, nickel, cornamusa, duduk y xalumo?. Esta manera armónica, instrumental y profunda de entender la música se expresa en todos los directos de Capella de Ministrers, y se realza además mediante una interpretación históricamente informada, que inteligentemente pretende llegar a conseguir en cada momento el anhelado impacto con el público, como así sucedió en la iglesia de Santa María en una noche redonda gracias a un magnífico concierto al cobijo de la luna llena, la Superluna del Esturión.
Para Carles Magraner, reciente Académico Numerario en la Academia de la Música Valenciana, nuestro país sigue siendo una plataforma única para el desarrollo de proyectos profesionales relacionados con los territorios de la música antigua: “La valía de los músicos españoles es cada vez mayor, pero aún falta por consolidar plataformas estables de recuperación del patrimonio musical. Somos los museos vivientes de la música del pasado, y quizás aún hay que rebuscar en las sensibilidades para convencer de nuestro trabajo, que no sólo recupera el patrimonio sino que aporta riqueza y felicidad”, destaca el reconocido experto.