Comisaria: Sara Guérín
Beca de Comisariado 2015
Working with a brother presenta por primera vez en Huesca capital el trabajo artístico de Brosmind. La exposición reflexiona en torno a la importancia del vínculo fraternal que existe entre ellos y describe cómo el trabajo actual puede considerarse como una extrapolación de las creaciones infantiles. Durante su infancia, Juan y Alejandro ya formaron una prolífica pareja creativa que podría considerase como el germen de lo que es ahora su universo visual y conceptual. Este hecho personifica la esencia de Brosmind, y es de gran importancia tanto en los contenidos que generan como en su mecánica de trabajo.
En la muestra se ha querido brindar protagonismo al público e incidir en la interacción directa con la obra con el fin de resaltar la capacidad experimental de la exposición. Desde el inicio del recorrido, el espectador puede adquirir una función activa con la bienvenida de Motorbikes (2016): 5 deslizadores monoplaza, construidos en madera y metal que sirven de medio de transporte a los visitantes de la exposición y que cuentan con un sistema de audioguía. El público pasa de ser mero espectador a formar parte de la muestra e incluso a crear sus propios contenidos.
Dentro de una constante inquietud por explorar nuevos materiales, colaboraciones y posibilidades creativas, surge la obra Face (2016). La especialidad de Bromind es la creación de personajes. Con Face exploran el campo de la instalación artística a través de una inmensa figura hinchable. La obra va más allá a la hora de provocar emociones en el público, ya que la interacción con el espacio altera nuestro comportamiento cuando visitamos la exposición.
Por último, otra de las novedades interesantes de la muestra son los gadgets tecnológicos de toma de decisiones Brosmind Tech 1-3. La serie es una extrapolación del modelismo de la infancia de los hermanos, que conserva una interesante estética de fabricación casera. Se da al público la oportunidad de probar estas creaciones, aunque se trate de un recurso interno de Brosmind que funciona al estar pensado y diseñado para un sistema único, entre hermanos.
La experiencia expositiva invita al público a descubrir el universo Brosmind a través de interesantes intervenciones en el espacio que contemplan todo tipo de técnicas y soportes. Podemos ver como las acumulaciones y las multitudes son un signo de identidad en la exposición y un recurso efectivo a la hora de conquistar materiales y espacios. El movimiento impregna las obras transmitiendo frescura y vitalidad, los encargos personales se retroalimentan dentro de una evidente omnipresencia de la comida. Comida personificada y personajes con un tratamiento comestible. Una estética con notas americanas en la que el fast food cobra vida, y se entremezclan seres y pequeñas historias cómicas y surrealistas. El universo Brosmind presenta una constante dualidad en la que a veces confundimos contenedor y contenido, un abigarramiento genial en el que nada es lo que parece. Un entramado de personajes en el que la materia no tiene límites y lo visceral se confunde con la fantasía. Lo blando, lo viscoso, lo líquido y lo volátil, frente a los gadgets tecnológicos y las formas geométricas.
La actitud frente a la creación artística que comparten Juan y Alejandro es uno de los aspectos más interesantes de la muestra. La búsqueda de la libertad creativa, la espontaneidad y la huida de los complejos y prejuicios artísticos puede sentirse no solo en el proceso creativo, sino en la misma obra o incluso en aspectos del diseño expositivo. La importancia dada al boceto por encima del resultado es una idea que explica en gran medida la genialidad de sus obras y la frescura que las caracteriza.
La exposición se acompaña de una publicación con textos de Sara Guérín, Lorenzo Llanas y Brosmind, que consta de dos partes: una primera que consiste en un diario de producción con dibujos del diseño de la exposición junto a los desarrollos de sus nuevas piezas creadas para Huesca. Y una segunda parte con textos, entrevista y portfolio de los artistas.